El verano es una bendición. Deshacerse de chaquetas pesadas, disfrutando del sol en la piel. Los días más largos y las noches más cortas te hacen sentir que tienes más tiempo para divertirte fuera de casa. Sin mencionar el gelato de fresa, las playas abarrotadas, la arena caliente en los pies, docenas de fiestas en la piscina… ¿Te apetece tanto como a mí que el verano se quedes más tiempo?
Sin embargo, la diversión extra del verano podría consumirte y ralentizar tu progreso de escritura. Si tienes problemas para hacer tu trabajo o quieres mejorar tu hábito de escritura este verano, aquí te traemos algunos consejos para ayudarte a combatir el agotamiento estival de la escritura.
1. Establece un nuevo horario
Los conciertos de música en la playa, los festivales salvajes, las cenas a altas horas de la noche y la bebida… Este verano completo y colorido puede cambiar tu horario habitual.
Entonces, lo primero es tomarte un momento para pensar cuándo sería tu mejor hora para escribir durante el día y luego ponerlo en tu calendario. Y crea un nuevo horario para comenzar tu rutina de escritura de verano. Asegúrate de dejar por lo menos de 15 a 30 minutos para escribir todos los días.
Hay un dicho: muchos pocos hacen un mucho. Si escribes 300 palabras por día, serán 2100 palabras por semana, casi 10.000 palabras por mes. Así que no subestimes cada pequeño progreso que hagas.
2. No tienes excusas para la procrastinación
Es razonable que no puedas terminar tu objetivo de escritura cuando hay tantas actividades que suceden y no te quieres perder ninguna de ellas. Aún así, que el día sea más largo no significa que tengamos más de 24 horas.
A nadie le gusta la presión y la ansiedad que trae la postergación por divertirse demasiado. No dejes que el verano se convierta en la razón por la que has dejado abandonado tu bolígrafo durante meses. No importa lo ocupado que estés, haz un esfuerzo para escribir.
La peor parte de la procrastinación es que puedes olvidar las tramas, los personajes o las historias que has creado la última vez, y tienes que repasar la historia de nuevo para refrescar la memoria. Cuanto más tiempo dejes de escribir, más tiempo tendrás que dedicar para volver al trabajo. Por eso es importante seguir con el hábito de escribir.
3. Obtén inspiración del verano
Tratar de salir de la ciudad para ir de excursión es uno de los mejores regalos que puedes tener durante el año. Nadar en las aguas cristalinas, explorar nuevos lugares y hacer nuevos amigos, degustar deliciosos y exóticos platos… La lista de emociones vacacionales puede ser bastante extensa.
Y hay tantas cosas inesperadas que suceden durante tus viajes… Habla con los lugareños y aprende sus dialectos; visita los museos y los edificios, ahonda en la historia y la cultura de la ciudad. Siempre y cuando te centres en descubrir esos pequeños detalles, las vacaciones te ofrecerán muchos recursos de escritura fantásticos y te inspirarán a escribir.
Puedes mejorar tus habilidades de escritura durante las vacaciones haciendo preguntas como estas: «¿Qué atrae tu atención en ese mercado bullicioso? ¿Puedes describir el sonido del viento que sopla desde la cima de la montaña? ¿O ese olor delicioso del restaurante?».
Este ejercicio puede agudizar tus habilidades de observación y conducir a descripciones únicas en tu escritura. Quedarse en casa demasiado tiempo hará que te quedes sin ideas. Entonces ¿por qué no te das oportunidades para generar ideas de historias más interesantes?
4. Sé flexible
El verano está lleno de risas y emoción porque hay innumerables eventos y actividades esperando a que te unas. Y, a veces, los planes de última hora pueden aparecer e interrumpir tu agenda, y no puedes terminar el objetivo de escritura para ese día.
Por favor, no te agobies porque te retrases, ya que la ansiedad afectará a tu escritura. Sé flexible, simplemente compensa lo que no escribiste ayer. Programar sesiones de escritura más pequeñas para mantener el impulso te ayudará a llevar a cabo el trabajo de forma persistente hasta el final.
Si estás demasiado cansado para escribir después de asistir a un montón de actividades, no te fuerces a escribir porque la escritura debería ser un placer en lugar de una tortura. Solo deja tu pluma y recoge tus libros favoritos para leer. Leer es muy relajante, da descanso a tu cerebro durante un día ocupado y estimula tus pensamientos, te proporciona una inspiración sorprendente.
5. Crea tu zona de confort personal
El verano es vivo, animado y lleno de diversión. Por lo tanto, no hay mucho tiempo de calidad para escribir en comparación con otras temporadas. Así que es importante preparar una zona de confort para dejar fluir tu imaginación.
En mi caso, me siento súper enérgica por la mañana después de despertarme con el sol de verano y una taza de café. Es el mejor momento para comenzar a escribir. Sin embargo, no puedo escribir ni una palabra por la noche porque hago todo lo posible para asistir a cada evento interesante y estoy totalmente agotada después de un día sin parar.
Pero algunas personas son más productivas por la noche porque sienten que por fin pueden centrarse en escribir después de marcar toda la lista de tareas pendientes. Otras no pueden escribir en casa porque es demasiado cómodo y tiene muchas distracciones, como la televisión, el ordenador o esa seductora cama.
En ese caso, ve a otro lugar para trabajar, como una cafetería o una biblioteca. Encuentra la forma más agradable para escribir sin distraerte ni tener interrupciones. Todos tenemos necesidades especiales, así que busca el entorno que más te convenga.
Nuestra pregunta
¿Cuál es el principal obstáculo que te impide escribir en el verano?