Después de un mes de planificación llegó el día. Impartiríamos nuestro taller de creación de microrrelatos en la Librería Gigamesh.
El taller
Antes de la hora indicada, los asistentes ya estaban en su sitio esperando que comenzara el taller. Cosas del directo, la exportación de la presentación dio problemas y tardamos un rato en poder solucionarlo (no fue demasiado tiempo por suerte).
Una vez arreglado empezamos presentándonos, así como explicando en qué consiste El Libro del Escritor. Dividimos el taller en formato de decálogo, así que fuimos explicando cada punto esencial del género de los microrrelatos.
Tras varias transparencias llegó el primer ejercicio. Para practicar la precisión de nuestras descripciones los escritores tuvieron que describir de viva voz a Jose un cuadro que estaba a sus espaldas (y que obviamente no podía ver hasta que finalizara el ejercicio). Él trató de dibujarlo según las indicaciones que le dieron y, al finalizar, mostró el resultado y les explicó en qué aspectos deberían haber detallado más.
Después de este ejercicio realizamos otro más pequeño en el cual debían analizar el error de un microrrelato que compartimos con ellos.
Puestos a prueba
Para finalizar, tuvieron que poner a prueba los conocimientos adquiridos escribiendo un microrrelato de 20-25 palabras con título, de temática libre.
Después de un rato pensando y trabajando en ello, todos los escritores compartieron su relato con el resto y los analizamos de manera conjunta. Los resultados fueron muy positivos y permitió tener una primera toma de contacto con el género.
Como recompensa por haber participado en el taller, todos los escritores se apuntaron para formar parte del grupo de alfa testers de ELDE Pluma, la primera herramienta profesional de escritura multiplataforma, y así poder probarla en primicia.
Los comentarios globales del taller fueron que se les hizo muy corto y que les hubiera gustado disponer de más tiempo para poder trabajar más ejercicios.
Desde aquí, queremos agradecer a los asistentes su participación en el taller, así como a la Librería Gigamesh el haber podido realizarlo en su local. ¡Esperamos repetir en futuros talleres!
1 Comment
Aquel hombre ansiaba la muerte. Se metía en empresas arriesgadas, en aventuras peligrosas, provocaba a la gente, buscaba los duelos…Era un ser romántico, a quién la ruindad de este mundo se le hacía insoportable, Cuando nos enfrentamos, pistolas en mano, me parece que una especial alegría corrió por sus venas. Cayó como un pajarito. Creo que nunca tanto bien le hice a nadie.